Economía | El BCRA, bajo la conducción de Santiago Bausili, reducirá encajes bancarios y flexibilizará regulaciones con el objetivo de aumentar la liquidez, bajar tasas de interés y dinamizar el mercado financiero.
El Banco Central de la República Argentina (BCRA), bajo la dirección de Santiago Bausili, informó este jueves una serie de medidas de flexibilización monetaria que comenzarán a regir en diciembre. El objetivo central de la autoridad monetaria es relajar el "apretón" previo a las elecciones, fomentar una mayor liquidez en el mercado, impulsar la reactivación del crédito y generar una baja en las tasas de interés.
La primera iniciativa, con vigencia desde el 1 de diciembre, consiste en la reducción del 3,5% del requisito de efectivo mínimo (encajes) para los depósitos a la vista, que incluyen fondos comunes de inversión de mercado monetario, cauciones y pases pasivos. Para lograr que esta disminución libere liquidez, el BCRA eleva en 3,5% la proporción que los bancos pueden integrar con bonos públicos para cubrir los encajes ligados a estos conceptos. La entidad busca así que haya una mayor integración de títulos para dejar libres pesos que se inyecten a la economía real.
Una segunda disposición flexibiliza nuevamente la integración diaria del efectivo mínimo. A partir de diciembre, el mínimo diario de cumplimiento bajará del 95% al 75%. Esta medida responde a un fuerte reclamo del sector bancario, que consideraba difícil cumplir con una integración diaria tan alta en un contexto de inflación y presión cambiaria. Además de esta baja, la exigencia adicional de cinco puntos en los encajes de depósitos a la vista correspondientes a los bancos de la categoría A se extiende hasta el 31 de marzo, y se amplía la gama de bonos admitidos como integración de encajes.
Desde la autoridad monetaria destacaron que “las flexibilizaciones aprobadas van en línea con la expectativa de recuperación de la demanda de dinero y la expansión del crédito esperada para los próximos meses”. Los encajes son el porcentaje de los depósitos que los bancos deben mantener inmovilizados en el BCRA como mecanismo de seguridad y herramienta de política monetaria. Durante el período de volatilidad cambiaria previa a las elecciones, el BCRA había endurecido estas regulaciones para evitar que los "pesos sueltos" presionaran sobre el dólar.
La relajación actual se da en un contexto en el que el equipo económico espera que el fin del período electoral, con el resultado favorable al Gobierno de Javier Milei, implique un incremento en la demanda de pesos. En esa línea, el vicepresidente del BCRA, Vladimir Werning, anticipó a inversores en Washington que la autoridad monetaria espera comenzar a comprar reservas a partir de 2026.