Polítia | En una extensa jornada legislativa que se prolongó por más de doce horas y finalizó pasada la medianoche, la Cámara de Diputados de la Nación rechazó en paquete todos los Decretos delegados y el Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) que estaban incluidos en el temario. El revés parlamentario representa un duro golpe para el Gobierno nacional, que ahora dependerá de la decisión del Senado para mantener en pie dichas normativas.
El último tramo de la sesión estuvo marcado por un intenso debate sobre la validez del procedimiento impulsado por la oposición, que proponía votar sin necesidad de contar con los dos tercios de los votos.
La iniciativa fue impulsada por el bloque de Unión por la Patria, aunque su presidente, Germán Martínez, no intervino en esa instancia del debate.
Durante la jornada, Martínez exhortó a sus colegas a mantenerse alerta y evitar que por alguna maniobra parlamentaria se cayera la sesión.
Tras un llamado del Diputado Juan Manuel López a dejar de lado los discursos extensos y avanzar directamente con la votación, varios legisladores decidieron no hacer uso de la palabra, incluso integrantes de la izquierda, lo que resultó llamativo. Mientras la mayoría opositora se enfocó en concretar la votación, desde el oficialismo y sus aliados expresaron su rechazo.
El jefe del bloque Pro, Cristian Ritondo, sostuvo que los decretos habían sido aprobados en el marco de la Ley Bases y que quienes los votaron en su momento no podían alegar desconocimiento.
“Vamos a votar en contra de lo que están proponiendo, pero también les pedimos a aquellos que acompañaron cuando votamos esto, que tomen conciencia que la campaña es corta, pero la vida institucional es larga”, señaló.
Desde La Libertad Avanza, el mendocino Álvaro Martínez acusó al kirchnerismo de estar "desesperado" por poner en jaque el equilibrio fiscal del Gobierno, y defendió las facultades otorgadas por el Congreso al presidente.
En sintonía, el santafesino Nicolás Mayoraz calificó la votación como "nula" y cuestionó que se estuviera dejando de lado el rol constitucional de la Comisión Bicameral encargada del análisis de los decretos.
Mayoraz también advirtió sobre la necesidad de aplicar el artículo 147 del reglamento, que exige los dos tercios para tratar ciertos temas.
“Tenemos un reglamento y lo debemos aplicar”, afirmó, ironizando que “sería mucho más difícil declarar de interés la fiesta de la mandarina que derogar un DNU”.
La Diputada libertaria Lilia Lemoine también se sumó a las críticas, denunciando la "urgencia" del kirchnerismo por cerrar la sesión y acusando a la oposición de querer dañar al Gobierno.
“Cuando ustedes quieren dar de baja decretos que el presidente necesita para poder gobernar queda muy en evidencia que lo que quieren es dañar al Gobierno”, sentenció.
Desde el otro lado, Juan Manuel López y la Diputada kirchnerista Carolina Gaillard justificaron jurídicamente la potestad de la Cámara para tratar los decretos de oficio y con mayoría simple.
Margarita Stolbizer, por su parte, denunció la inactividad de la Comisión Bicameral y sostuvo que el Congreso tiene plena atribución para derogar normas del Ejecutivo, incluso sin necesidad de fundarlas.
Resultados de las votaciones Los decretos sometidos a votación fueron rechazados uno a uno: Decreto 462/25, que modificaba organismos como el INTI y el INTA: 141 votos afirmativos (rechazo), 65 negativos y 1 abstención.
-Decreto 345/25, sobre organismos de Cultura: 134 a favor del rechazo, 68 en contra y 3 abstenciones.
-Decreto 351/25, que modificaba el Banco Nacional de Datos Genéticos: 133 votos afirmativos al rechazo, 69 en contra y 2 abstenciones.
-DNU 340/25, relacionado con la Marina Mercante: fue aprobado con 118 votos a favor, 77 en contra y 8 abstenciones.
-Decreto 461/25, que afectaba organismos como la Secretaría de Transporte y Vialidad Nacional: 138 votos afirmativos al rechazo, 65 negativos y 2 abstenciones.
Con esta decisión, la Cámara baja cerró una jornada de fuerte contenido político e institucional. Ahora será el Senado el que deberá decidir si acompaña el rechazo de los decretos, lo que determinaría su invalidez definitiva.
