Política | El Decreto de Necesidad y Urgencia 70/2023 fue rechazado, a las 19:42 de este jueves, y el expediente será girado a Diputados.
El mega Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) que desregula la economía, rechazado por el Frente de Todos y la oposición anti kirchnerista, genera un traslado crucial hacia Diputados.
Esta norma, que aún se mantiene vigente pero que podría ser la primera desactivada por ambas Cámaras del Congreso, ha elevado la tensión tanto en el ámbito legislativo como en la relación entre el presidente y la titular del Senado, Victoria Villarruel.
Durante el debate en el Senado, el jefe de La Libertad Avanza, Ezequiel Atauche, intentó postergar el análisis de la medida a través de una moción que no tuvo éxito.
Este intento de postergación fue clave para marcar el destino final del DNU. Varios sectores, incluyendo el kirchnerismo, peronistas disidentes y provinciales, jugaron un papel decisivo en el rechazo de esta medida.
El Frente de Todos, junto con los opositores anti kirchneristas y otros legisladores, se mostró unido en el rechazo del DNU. Por otro lado, algunos legisladores se abstuvieron en la votación.
Ahora, la definición del mega DNU pasa a Diputados, donde se parte de una base de al menos 110 votos a favor del rechazo.
La bicameral de Trámite Legislativo, encargada de analizar este tipo de normas, se enfrenta a la presión de la oposición para recibir explicaciones de funcionarios, especialmente del Jefe de Gabinete, Nicolás Posse, y el Ministro de Economía, Luis Caputo.
La situación se complica aún más con la renovada ley “ómnibus” en Diputados y los primeros contactos entre gobernadores y la Casa Rosada sobre temas de interés financiero.
En medio de este escenario, el Senado aprobó convenios internacionales y sancionó modificaciones al Código Penal respecto a la prevención y represión del lavado de activos, la financiación del terrorismo y el financiamiento de armas de destrucción masiva, en respuesta a la visita del Grupo de Acción Financiera Internacional (GAFI).
